EL OJO MALIGNO.

Dice la Biblia en Éxodo 20⸴ 17: ‘ No se dejen dominar por el deseo de tener lo que otros tienen⸴ ya sea su esposa⸴ su sirviente⸴ su sirvienta⸴ su buey⸴ su burro⸴ o cualquiera de sus pertenencias’. Hay que poner atención a las conocidas palabras de Jesús: ‘ La lámpara del cuerpo es el ojo; así que⸴ si tu ojo es bueno⸴ todo tu cuerpo estará lleno de luz; pero si tu ojo es maligno⸴ todo tu cuerpo estará en tinieblas. Así que⸴ si la luz que hay en ti es tinieblas⸴ ¿ cuántas no serán las mismas tinieblas ? ( Mateo 6⸴22-23). Con respecto a lo malo del ojo⸴ no se refiere tanto a un problema de cataratas o glaucoma⸴ o cuando se está perdiendo la visión⸴ sino cuando el ojo ve cosas y graba imágenes a través de los cuales se mancha. Pedro⸴ en su segunda epístola 2⸴ 14-15⸴ habla acerca de personas que ‘ tienen los ojos llenos de adulterio⸴ no se sacian de pecar⸴ seducen a las almas inconstantes⸴ tienen el corazón habituado a la codicia⸴ y son hijos de maldición. Han dejado el camino recto⸴ y se han extraviado. ‘ Otra versión traduce esta porción de la siguiente manera: ‘ No puede ver a una mujer sin desearla’. Aquí realmente se trata de un ojo maligno⸴ y son éstas las personas a las que Jesús se refiere cuando dice: ‘ Pero yo les digo que cualquiera que mira con deseo a una mujer⸴ ya cometió adulterio con ella en su corazón ‘ ( Mateo 5⸴ 28). Es importante examinar si el ojo es o no maligno⸴ a la luz de la propia vida: * Un ojo que⸴ una y otra vez⸴ mira películas obscenas⸴ es maligno. * Un ojo que no puede dejar de echar miradas codiciosas hacia otras personas⸴ es maligno. * Un ojo que⸴ necesariamente⸴ es decir como por compulsión⸴ tiene que mirar⸴ una y otra vez⸴ las páginas ilustradas de revistas con doble sentido⸴ es maligno. * Un ojo que siempre tenga que estarse deleitando con cosas degeneradas⸴ antinaturales y perversas⸴ es maligno. Eva no sólo miró el fruto del árbol de Dios con deseo⸴ sino que lo arrancó⸴ comió y también le dio a Adán para que comiera. Debido a eso⸴ ambos cayeron en grandes tinieblas interiores. David no sólo miró desde el terrado de su casa a la mujer de Urías con lujuria⸴ sino que también cayó en adulterio con ella. Por mucho tiempo⸴ este hecho marcó su vida como una oscura sombra. (2 samuel 12⸴10-14). Pero también ocurre esto en el diario vivir actual: es por eso que se producen tantas violaciones y maltrato infantil⸴ porque los autores⸴ primaremante⸴ lo han visto en revistas y videos. No podemos subestimar esta cruda realidad: ‘ La mirada de un ojo maligno es la señal de partida para muchos actos repulsivos. La codicia comienza porque los ojos han enfocado un deseo.