BIENVENIDOS A LA ETERNIDAD

Materiales bíblicos para el mundo

BIENVENIDOS A LA ETERNIDAD

21 enero, 2019 Tratados 0

Segundos después de morir usted va a tener su primera visión del cielo con toda su grandeza y felicidad o su primera auténtica experiencia de un horror y pena implacables. En cualquier caso⸴ su futuro quedará determinado para siempre y eternamente inalterable.



En esos primeros momentos⸴ usted estará más despierto de lo que jamás ha estado antes. Recuerdos vivos de sus amigos y de su vida en el planeta tierra se mezclarán con una anticipación intimidante de la eternidad. Usted tendrá su primera visión directa de Cristo o su primer encuentro con el mal como nunca antes lo ha conocido. Para entonces será demasiado tarde querer cambiar de domicilio.



Dos escenarios opuestos vienen a la mente. Uno es el del hombre rico seguro de sí mismo que murió y fue al Hades⸴ donde Cristo dice que : ‘alzó sus ojos⸴ estando en el tormento’ (Lucas 16⸴23). Todas su facultades estaban intactas: podía ver⸴ sentir⸴ oír y recordar su vida en la tierra. E incluso hoy⸴ mientras usted está leyendo este tratado. él está completamente consciente⸴ sabiendo que no hay escape para su situación.



El otro cuadro es el del ladrón crucificado a quien el Cristo moribundo dijo: ‘ De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso’.


(Lucas 23⸴43). Este también tenía todas sus facultades intactas; y hoy todavía goza de la presencia de Cristo en el paraíso.


¿ Se sorprenderá usted si le dijera que Cristo enseñó que muchos más van camino del sufrimiento que del éxtasis ? Muchos más van a estar en una angustia eterna y consciente que de un gozo desbordante.



¿ Es posible saber en esta vida dónde pasaremos la eternidad ? Algunos creen que no⸴ insistiendo en que todo lo que podemos hacer es esperar lo mejor y confiar en la misericordia de Dios.



Muchas buenas personas se unirán al hombre rico en el Hades⸴ no porque son ricas⸴ sino porque son buenas y están confiadas en su propia bondad para salvarse. A pesar de toda su sinceridad⸴ se verán a sí mismas en el lado de fuera de las puertas del cielo⸴ sin saber que sólo se otorga a aquellos que cumplen con un requisito especial que es aceptar a Cristo como el Salvador y Señor de sus vidas. No hay otra puerta⸴ no hay otro camino; pues Él es el Camino⸴ la Verdad y la Vida.



Equivóquese acerca de la jubilación⸴ o acerca del futbol⸴ de su elección de carrera o en el matrimonio; pero no se equivoque acerca de dónde pasará la eternidad.