Devocional 2018-05-21
¡INSTÁLESE EN EL CASTILLO!
Si hijos⸴ también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo. Romanos 8:17
Las inescrutables riquezas de Cristo… Efesios 3:8
La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros. Colosenses 3:16
Un hombre pobre acababa de recibir una herencia inesperada. Un tío que no tenía hijos había muerto súbitamente y él era el único heredero. ¡De repente se había convertido en el propietario de un castillo rodeado de un gran terreno! ¡Era rico!
Se disponía a tomar posesión de la propiedad. Pero⸴ intimidado⸴ no se atrevió a ocupar el castillo. Prefirió instalarse con su familia en una cabaña destinada al encargado de cuidar la propiedad. El notario fue a visitarlos y estupefacto exclamó: «Pero señor⸴ ¡instálese en el castillo!». Le mostró el documento que probaba que todo le pertenecía. ¡Qué lástima conformarse con una vivienda pequeña e incómoda cuando se posee un castillo!
Al recibir a Jesús por la fe⸴ nos convertimos en hijos de Dios y herederos de las riquezas divinas. Pero a menudo nuestra vida cristiana es pobre y mediocre. Nos conformamos con saber que somos salvos⸴ sin tomar posesión activa de las riquezas que Jesús nos ofrece: el perdón de nuestros pecados⸴ la benignidad permanente de Dios⸴ el conocimiento del Padre⸴ el acceso a él mediante la oración⸴ la liberación del poder del pecado⸴ la esperanza de la vida eterna⸴ la perspectiva de compartir la gloria del Hijo de Dios⸴ ¡y todo el gozo y la paz que Dios quiere que experimentemos desde ahora en la tierra!
El «acta notarial» mediante la cual conocemos nuestros derechos es la Palabra de Dios. Leámosla atentamente y descubriremos cuán ricos somos.
© Editorial La Buena Semilla⸴ 1166 PERROY (Suiza) ediciones-biblicas.ch – [email protected]
“