EJEMPLO DE LOS PADRES.
En los inicios de este tercer milenio⸴ los países latinoamericanos estamos entrando a una decadencia moral sin precedentes. La generación actual ha escrito un nuevo conjunto de mandamientos personales para regir sus vidas. He aquí algunas de ellas: 1- No veo la necesidad de dedicar un día a Dios; 2- Robaré a la gente que no lo eche de menos; 3- Mentiré cuando me convenga; 4- Tomaré bebidas alcohólicas y manejaré un vehículo si creo que puedo hacerlo. Conozco cuál es mi límite ; 5- Engañaré a mi cónyuge; después de todo si él o ella tiene la oportunidad⸴ hará lo mismo conmigo; 6-Evadiré⸴ hasta cierto punto⸴ en el pago de los impuestos. ¿ Cómo puedo hacerle frente⸴ con mi familia a este atentado contra la moralidad ? La Escritura es bien clara: ‘ Y estas palabras (mandamientos) que yo te mando hoy⸴ estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos⸴ y hablarás de ellas estando en tu casa⸴ y andando por el camino⸴ y al acostarte⸴ y cuando te levantes. Y las atarás como una señal en tu mano⸴ y estarán como frontales entre tus ojos; y las escribirás en los postes de tu casa y en tus puertas ‘ (Deuteronomio 6⸴6-9). Dios desea que los valores se enseñen en el hogar. No podemos echar la culpa a las escuelas ni a las iglesias. Dios coloca esta responsabilidad directamente sobre los hombros de los padres. Orlando Gálvez de 32 años; su esposa Carmen Cintron de 29 años y sus dos hijos de 18 y 4 meses de edad respectivamente⸴ fueron encontrados asesinados dentro de un lujoso Mercedes Benz⸴ que resultó ser robado.. La pareja tenía al menos dos domicilios en el barrio neoyorquino de Queens . En uno de ellos la policía encontró 15 millones de dólares en cocaína⸴ un millón de dólares en efectivo y diferentes clases de armas. Solamente en los Estados Unidos⸴ el negocio de la droga manipula anualmente sobre 60 mil millones de dólares. Y por lo menos el 90% de las hojas de coca en el mundo⸴ se originan en la América del Sur. QUE LOS PADRES SEAMOS EJEMPLO A NUESTROS HIJOS. . Recuerdo un desafío que un hijo lanzó en la cara de su padre⸴ que según las apariencias externas había alcanzado el éxito. Luego de escuchar un sermón sobre moralidad⸴ su hijo le respondió: ‘ Mírate a ti mismo. Necesitas unas copas para darte valor. Mírate a ti mismo⸴ metiéndote en secreto con la mujer del vecino; pretendiendo demostrar que eres un tipo listo. Mírate⸴ adicto a un montón de píldoras y sedativos. ¿ Y tú quieres decirme a mí cómo vivir ? ¡ Vamos papá; seguro que estás bromeando ! Los hijos oyen nuestras palabras⸴ pero ellos básicamente aprenden por nuestras actitudes.