EL AMOR ES ASÍ.

Después de pensarlo mucho⸴ Artur Johnson⸴ de Askersund⸴ Suecia⸴ tuvo que enfrentar la realidad. De pie frente al espejo⸴ y hablando consigo mismo dijo: ‘ Artur⸴ estás enamorado. Y es la primera vez en su vida. Tienes que hacer algo ‘. Y Artur Johnson le declaró su amor a la mujer amada⸴ Ingrid Engdal⸴ de cincuenta y cinco años. Con la timidez y el rubor de todo buen enamorado⸴ Artur le pidió a Ingrid que se casara con él. Y ella dijo ‘ sí’. Y a los quince días estaban jurándose amor eterno ante el ministro. Lo curioso del caso era la edad del novio: ciento un años. ¿ Cómo podemos comentar esta noticia ? Podríamos decir : ‘ Nunca es tarde cuando la dicha es buena ‘. O podemos decir: ‘ El amor es ciego⸴ y Cupido lanza sus flechas al azar⸴ y al que le toca⸴ le toca ‘. Podemos decir también lo que el anciano Artur dijo a la prensa: ‘ Ahora comprendo lo que Dios ha dicho en la Biblia: ‘ No es bueno que el hombre esté solo. Le haré una compañera idónea para él ‘ ( Génesis 2⸴18). Artur Johnson no sólo se ganó una novia⸴ también se ganó una familia. Porque Ingrid es viuda y tiene cuatro hijos. De golpe el anciano de ciento un años ha visto su casa llena de gente. Tiene esposa⸴ tiene hijos⸴ y pronto tendrá yernos y nueras. Dios hizo al hombre primero⸴ para que sea su imagen viviente y el rey de la creación. Después le hizo la compañera idónea. La mujer que le brinde el amor y complete su felicidad y personalidad. Después le dio los hijos para formar la familia. Y es en la familia⸴ hecha como Dios manda⸴ lo más grande e importante que hay en la sociedad humana. Toda una serie de creaciones para llegar a la familia⸴ el grupo humano primordial. Si ya hemos formado una familia⸴ cuidémosla como el tesoro más grande. E inivitemos a Cristo a ser el huésped invisible⸴ el Señor que enseña⸴ que aconseja y que consuela. Amemos a la esposa⸴ amemos a los hijos . Hagamos del hogar⸴ una hoguera⸴ un lugar donde calentarnos⸴ abrigarnos⸴ ayudarnos; un pedazo del cielo en la tierra. Y los primeros bendecidos seremos nosotros mismos. Cristo desea ser el rey de su hogar. Él lo hará el núcleo de bendición tal como lo quiso antes que la humanidad se corrompiera. Introduzca su familia en el Reino de Dios. Señor⸴ te rindo mi familia a ti. Sé Tú la fuerza y la motivación a la unidad en mi hogar. Amén.