EL ATAQUE DE LAS RATAS. II PARTE

CONTINUACIÓN DE LOS TRATADOS 1666…
05. El enemigo quiere matar espiritualmente a la Iglesia del Señor. La llamada peste bubónica o negra⸴ de donde toma su nombre de rata negra⸴ que fue la responsable de la muerte de millones de personas. Fue una devastadora epidemia que asoló Europa en el siglo XIV y que⸴ se estima⸴ mató cerca de un tercio de la población del continente. La mayor parte de los científicos cree que la peste negra fue un brote de peste bubónica⸴ una terrible enfermedad que se ha extendido en forma de pandemia varias veces a lo largo de la historia.
El ataque de la rata debe ser visto con mucho cuidado por la iglesia ya que provoca peste. Quiere infectar la mayor cantidad de miembros de la iglesia⸴ como lo dijo el Espíritu Santo: El enemigo quiere llevarse una rebanada ⸴ Con el fin de no solo fulminar espiritualmente a estos miembros sino que así como la plaga⸴ extenderse paralizando proyectos de evangelismo que van a impedir que muchas almas vengan a Cristo.
06. Quiere destruir la providencia que el Señor tiene para su pueblo. Los daños en alimentos -humanos y de animales de corral-y en los campos de cultivos son las principales problemáticas que se achacan a la rata. La posibilidad de transmitir enfermedades hace también necesario su control. Podemos ver que así como la rata daña los alimentos y los cultivos⸴ en lo espiritual también daña todos los medios con los que llevamos el alimento espiritual a las almas que lo necesitan y querrá sembrar apatía por llevar la Palabra. Además⸴ incita la duda sobre los nuevos métodos de evangelismo⸴ como por ejemplo el Tratado Multimedia y cuestiona el Evangelismo que se hace. Quiere propiciar dureza en el corazón para aportar al Reino de Dios.
08. La rata va a querer robarnos la integridad. Rata también es un término.…(CONTINÚA)…..
Pastor Máster Miguel Calderón Valverde
correo electrónico: mcalderón@casadeoracióncr.com
ORACIÓN PARA ACEPTAR A CRISTO
Yo confieso que soy un pecador (a) en necesidad de salvación. Me doy cuenta que viene el día en que será demasiado tarde para ser salvo (a). Yo te recibo ahora Jesucristo como mi Señor y Salvador personal; perdona mis pecados e inscribe mi nombre en el LIBRO DE LA VIDA ETERNA. Amén