EL CIELO ES NUESTRA CASA ETERNA

El cielo es la presencia eterna de todo lo que pueda hacer feliz a un santo y la ausencia eterna de todo lo que pueda causar pena. No habrá lugar en el cielo para la enfermedad⸴ el dolor y las penurias; ni para el trabajo y el dinero⸴ ni para la preocupación y la ignorancia⸴ ni para la incomprensión y la injuria⸴ ni para la mentira y las peleas⸴ ni para las envidias y los celos⸴ ni para el mal humor y la infidelidad⸴ ni para el escepticismo ni la religiosidad⸴ ni para la superstición y la herejía y el cisma ni para las guerras y disputas o derramamiento de sangre⸴ ni para los crímenes y los juicios. Escuchemos lo que dice el inspirado apóstol Juan: ‘ No entrará en ella ninguna cosa inmunda⸴ o que hace abominación y mentira⸴ sino solamente los que están escritos en el libro de la vida del Cordero. ‘ (Apocalipsis 21⸴27). ‘ No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara⸴ ni de luz de sol⸴ porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos ‘ ( Apocalipsis 22⸴5). ‘ Ya no tendrán hambre ni sed⸴ y el sol no caerá más sobre ellos⸴ ni calor alguno; porque el Cordero que está en medio del trono los pastoreará⸴ y los guiará a fuentes de aguas de vida; y Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos ‘ ( Apocalipsis 7⸴ 16-17). ‘ Ya no habrá muerte⸴ ni habrá más llanto⸴ ni clamor⸴ ni dolor; porque las primeras cosas pasaron ‘ ( Apocalipsis 21⸴4). Prestemos atención a lo que dijo David cuando su hijo murió⸴ ‘ Mas ahora que ha muerto⸴ ¿ para qué he de ayunar ? ¿ Podré yo hacerle volver ? Yo voy a él⸴ mas él no volverá a mi ‘ ( 2 Samuel 12⸴23). ¿ Qué pueden significar estas palabras⸴ sino que David esperaba ver a su hijo y reencontrarse con él en otro mundo ? Evidentemente esta era su esperanza⸴ que le alentaba y hacía secar sus lágrimas. La separación no sería para siempre. Escuchemos lo que dice el mismo apóstol en la Carta a los Tesalonicenses 4⸴13-14 para consuelo de los enlutados: ‘ Hermanos⸴ no queremos que ignoren lo que va a pasar con los que yan han muerto⸴ para que no se entristezcan como esos otros que no tienen esperanza. ¿ Acaso no creemos que Jesús murió y resucitó ? Así también Dios resucitará con Jesús a los que han muerto en unión con él ‘. No tendrían sentido estas palabras de consuelo si no implicaran el mutuo reconocimiento de los creyentes. La esperanza de sus alegrías se desvanecería en los cristianos sin la esperanza de encontrar a sus seres queridos. El cielo no será un lugar extraño para nosotros cuando lleguemos allí. No nos oprimirá la fría y helada sensación de no conocer a nadie de los que nos rodeen. Estaremos mejor que en casa. Las cosas anteriores habrán pasado y la Biblia se habrá cumplido. ‘ Todas las cosas serán nuevas’