EL ESCUDO DE LA FE
Hay un cuento acerca de un escorpión y una rana que estaban a la orilla de un río. El escorpión le preguntó a la rana si lo dejaba cruzar el río sobre su espalda. La rana le dijo⸴ ‘ No⸴ porque cuando vayamos por la mitad del río me picarías y entonces nos ahogaríamos los dos.’ ‘ Yo sería muy tonto si hiciera eso ‘⸴ contestó el escorpión. ‘ Soy más inteligente. Por eso es que te estoy pidiendo que me lleves en tu espalda⸴ para no ahogarme.’ Después de un rato logró convencer a la rana de sus buenas intenciones y comenzaron a cruzar el río. Cuando iban por la mitad⸴ se cumplió lo que había dicho la rana. El escorpión no pudo resistir las ganas de picar a la rana. ‘ Por qué me picaste si antes me prometiste que no lo ibas a hacer ? Ahora vamos a morir los dos’. ‘ Lo siento⸴ rana⸴ ‘ contestó el escorpión⸴ ‘ simplemente que lo hago por instinto⸴ es mi naturaleza picar ‘. Satanás es completamente malo. Jesús nos da la descripción de las obras del diablo en Juan 10⸴10⸴ cuando dice: ‘ El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir ‘. Efesios 6⸴16 dice: ‘ Sobre todo⸴ tomad el escudo de la fe⸴ con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno ‘. Enfrentamos un ejército poderoso que tiene por meta destruir la Iglesia de Cristo. Aunque estamos seguros de la victoria⸴ debemos batallar hasta que Cristo venga⸴ porque Satanás lucha constantemente en contra de todos los que están del lado del Señor. Requerimos de poder sobrenatural para vencer a Satanás y Dios nos lo puede dar a través del Espíritu Santo. El Espíritu Santo nos ha dicho en los últimos mensajes de interpretación de lenguas que todos los cristianos debemos proteger nuestro corazón⸴ no quiere que haya rencor ni una Iglesia egoísta. Por eso es importante pedirle al Señor⸴ que cubra nuestro corazón con el escudo de la fe⸴ pues el diablo quiere atacarnos en forma de insultos⸴ contrariedades y tentaciones. Pero el escudo de la fe nos va a proteger de los dardos de fuego que arroja el maligno⸴ podemos ver más allá de nuestras circunstancias y tener presente que la victoria final es nuestra. Con el escudo de la fe⸴ cuando nos sean disparados los dardos encendidos del maligno⸴ darán contra él y caerán inofensivos al suelo. Aquí⸴ la fe es la firme confianza en el Señor y en su Palabra. Cuando las tentaciones queman⸴ cuando las circunstancias son adversas⸴ cuando asaltan las dudas⸴ la fe mira arriba y dice: ‘ Creo en Cristo ‘. ‘ Amante Padre celestial⸴ en el nombre de Jesús⸴ tomo por fe la protección del escudo de la fe. Cuento con tu santa presencia para una cobertura total contra los dardos del diablo ‘