EL JUICIO FINAL.
‘ Vi un gran trono blanco⸴ y al que estaba sentado en él… Y vi los muertos⸴ grandes y pequeños⸴ de pie delante del trono; y fueron abiertos los libros⸴ y también otro libro⸴ que es el libro de la vida. Los muertos fueron juzgados de acuerdo con sus hechos y con lo que estaba escrito en aquellos libros. El mar entregó los muertos que había en él⸴ y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos⸴ y fueron juzgados cada uno según sus obras. La muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda. El que no se halló inscrito en el libro de la vida⸴ fue lanzado al lago de fuego ‘ ( Apocalipsis 20⸴11-15). Este pasaje describe la aterradora realidad con la cual tendrán que enfrentarse todos los perdidos desde Adán ( huerto de Edén) hasta la última rebelión después del reino milenial. Serán miles de millones de personas las que tengan que comparecer ante el juicio del gran trono blanco. Y luego les espera lo peor⸴ lo eternamente peor⸴ ser lanzados al lago de fuego que arde en azufre. Después que el diablo es lanzado al lago de fuego⸴ confinado en tormento por toda la eternidad: ‘ Y el diablo⸴ que los engañaba⸴ fue lanzado en el lago de fuego y azufre donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos ‘ (Apocalipsis 20⸴10)⸴ resuelto este problema⸴ entonces le toca el turno a todos los muertos perdidos⸴ y por eso aparece en gran trono blanco. En este trono aparecen los muertos sin Cristo. El versículo 13 nos explica que no importaba la manera en que murieron. No importaba si sus restos humanos se degradaron⸴ desintegraron o momificaron. Todos ahora poseían de nuevo cuerpos inmortales. Se abren otros libros. Son precisamente los que registran las obras⸴ el vicio⸴ el crimen⸴ el pecado de cada quien⸴ hasta el más mínimo detalle y; cuando una persona se convierte a Cristo⸴ sus pecados son borrados (Salmo 32⸴1: Hechos 3⸴19)⸴ y es entonces cuando su nombre es escrito en ‘ el libro de la vida ‘. Todo aquel que aceptó a Cristo⸴ nació de nuevo ; estará inscrito en ese libro⸴ siempre y cuando no haya apostatado ( convertidos que descuidaron su salvación⸴ que fueron vencidos por la tentación⸴ por el pecado y por el diablo: Hebreos 3⸴12-14; Apocalipsis 3⸴11). El destino eterno de los que no están escrito en el libro de la vida⸴ será el lago de fuego y azufre. Cruel realidad que les espera a pecadores y demonios.