LA IGLESIA DEL TERCER MILENIO
‘ Yo pondré a mis ovejas alrededor de mi monte santo⸴ y las bendeciré; les enviaré lluvias de bendición en el tiempo oportuno . Los árboles del campo darán su fruto⸴ la tierra dará sus cosechas⸴ y ellas vivirán tranquilas en su propia tierra. Cuando yo libere a mi pueblo de quienes lo han esclavizado⸴ entonces reconocerán que yo soy el Señor…….Les daré sembrados fértiles⸴ y ellos no volverán a sufrir hambre ni las demás naciones volverán a burlarse de ellos. Entonces reconocerán que yo⸴ el Señor su Dios⸴ estoy con ellos⸴ y que Israel es mi pueblo ‘
Confío en que el Espíritu Santo renovará en nosotros esta necesidad que todos tenemos de un avivamiento sin precedentes en la historia del pueblo de Dios. La Iglesia necesita fuego de Dios en sus reuniones. La Iglesia necesita pastores de fuego⸴ profetas de fuego⸴ adoradores de fuego⸴ evangelistas de fuego⸴ maestros de fuego. Las llamas del fuego de Dios deben ser vistas en nuestro medio.
Dios está levantando a su pueblo. Lo está uniendo en su amor y convocando a la oración por las almas perdidas. En todo el mundo comienzan a escucharse las noticias de nuevos fuegos que se encienden por el Espíritu de Dios.
Necesitamos experimentar un avivamiento real⸴ necesitamos experimentar⸴ primero⸴ un avivamiento personal⸴ necesitamos más poder santificado⸴ necesitamos llevar a Cristo a nuestros hogares⸴ necesitamos volver a las verdades de la Biblia. Necesitamos ver huir a los espíritus de maldad⸴ que iglesias decaídas en su vida espiritual se recuperen y⸴ que los cultos se transformen en verdaderas fiestas de alabanza y adoración.
Si nuestro avivamiento es real experimentaremos también un llamado a vivir en santidad. Estaremos dispuestos a quitar todo vestigio de pecado en nuestras vidas y buscaremos al Señor para agradarle ‘ en la hermosura de la santidad ‘. Los nuevos creyentes en Cristo dejarán su antigua vida de pecado y será tan grande el testimonio de su conversión que arrastrarán a muchos a los pies de la cruz. Aún nuestra sociedad será transformada por estos hombres y mujeres que desean vivir con justicia y rectitud delante de Dios y de los hombres.
Queremos un verdadero avivamiento de gracia y verdad. Que Jesucristo sea levantado⸴ que toda lengua lo confiese como el Señor y el Salvador del mundo.