LA SUPERSTICIÓN ES UN INSULTO A DIOS.
En una aldea⸴ a 30 millas de Manila⸴ exhumaron el cadáver de una joven que había sido enterrada nueve años antes; y según las informaciones de prensa⸴ al correrse la voz de que el cadáver estaba intacto⸴ las multitudes acudieron al cementerio y se comieron toda hierba que crecía en torno a la tumba⸴ afirmando que aquella hierba curaba todas las enfermedades; y según el corresponsal de la Prensa Unida⸴ cuando se acabó la hierba⸴ los peregrinos tomaban piedras⸴ barro⸴ pedazos de concreto⸴ y cuanto hallaban. La superstición es una creencia semireligiosa⸴ irracional e infundada⸴ que trata de convencer a las personas de que ciertas obras⸴ objetos o números pueden traerle suerte o desgracias. Por ejemplo⸴ creer que romper un espejo trae mala suerte⸴ o llevar una herradura trae felicidad⸴ o que el número 13 o un gato negro pueden traer desgracias. CUANTO MENOR SEA LA VERDADERA FE DE UNA PERSONA⸴ TANTO MAYORES SON SUS SUPERSTICIONES. La gente que cree en Dios y en su poder⸴ no necesita vanas e irrazonables creencias en un poder que las cosas materiales no tienen. Muchas personas⸴ al ver que no hay solución a sus problemas en la medicina⸴ la psiquiatría o en el dinero⸴ fabrican las respuestas en las supersticiones. Esto va directamente contra el Primer mandamiento de la Ley de Dios⸴ que prohibe creer que una criatura tiene los poderes de Dios. Creer por ejemplo que una MATA DE SÁBILA aleja la mala suerte de un negocio⸴ es darle a esa bendita hierba poderes que solo Dios tiene. Él⸴ y sólo El⸴ TIENE LOS PODERES SUFICIENTES para alejar los males de nuestros negocios. Creer que una simple mata de sábila es tan poderosa como lo es Dios⸴ para alejar males⸴ ES UN INSULTO AL CREADOR TODOPODERSO. Imaginarse que una herradura o un colmillo⸴ o una cruz magnética del gran poder⸴ tierra de cementerio⸴ traen suerte⸴ es darle poderes milagrosos a estos seres de metal⸴ de yeso o madera. El Salmo 115⸴4-9 dice: ‘Nuestro Dios está en los cielos; todo lo que quiso ha hecho. Los ídolos de ellos son plata y oro⸴ obra de manos de hombres. Tienen boca⸴ más no hablan; tienen ojos⸴ más no ven; tienen narices⸴ más no huelen; manos tienen⸴ más no palpan; tienen pies⸴ más no andan; no hablan con su garganta. CONFÍA EN EL SEÑOR⸴ ÉL ES TU AYUDA Y TU ESCUDO’.