Mensaje 802

Materiales bíblicos para el mundo

Mensaje 802

24 enero, 2019 Mensajes proféticos 0

MENSAJE PROFÉTICO DE JUEVES 10 DE JULIO
DEL 2008

PROFETA ADRIANA:

Yo tengo en mis manos los boletos que
ustedes necesitan y no son baratos y voy a poner esos boletos en sus sacos y si
están vacíos extiéndalos⸴ porque los voy a echar ahí. Ustedes han avanzado y
han ido produciendo y yo les voy a dar lo que han producido.

PROFETA SARA:

Ustedes cada día crecen y conmigo son
sabios y si cometen errores saben que no los pueden repetir. Ustedes saben que
todo lo que hacen no queda como en una bodega⸴ sino que rebota y llega a
ustedes. Yo no quiero ver a ninguno de mis hijos en aprietos⸴ que sientan en su
corazón destrozos⸴ porque ante sus ojos yo puedo cambiar la escena⸴ puedo hacer
cosas y cambiar⸴ como pueden tener a manos llenas. Por eso si ya han puesto
cifras⸴ confíen en la respuesta⸴ que no va a ser negativa.

PROFETA ESMERALDA:

Hoy he
visto un pueblo ágil. Hoy quiero encender con fuerte llama esos tizones⸴ porque
han estado a media llama algunos tizones. Y hoy yo soplo y levanto esa llama.
Yo quiero un pueblo ardiente⸴ un pueblo caliente⸴ un pueblo obediente y un
pueblo rápido. Porque esta marea ha estado lenta⸴ se le han presentado
obstáculos para ejercer su fuerza⸴ por eso ha estado a media marea. Yo quiero
que hoy ustedes se postren delante de mí en señal de gratitud por la marea⸴ que
confiesen que en plena semana va a fluir esta unción y que se preparen porque
el color empieza a encenderse. Este color se ha dado a ustedes con el
poder  y la sabiduría que empieza a
verse⸴ porque en Pérez Zeledón se está dando una importancia por el emblema. Yo
me muevo aquí y quiero que mañana a medio día ustedes estén mostrando sus
credenciales en donde quiera que estén como mis hijos⸴ mis amigos⸴ mis socios.
Porque en cierto bosque se está se está manipulando hombres y mujeres para que
no puedan confesar que yo soy y en algunos lugares ya esto se profundiza y no
quieren decir que el poder⸴ la unción viene de mí parte. Por eso es que yo aquí
quiero que ustedes sean sensibles a mí y que no pongan obstáculos para decir
que el poder y la unción han llegado. Porque el mundo sabrá de ustedes y van a
reconocer que aquí hay pueblo del Dios altísimo.