NO COMETERÁS ADULTERIO.

En Deuteronomio 5⸴18 leemos: ‘ No cometas adulterio ‘. Aquel era un hombre elegido por Dios; tenía todo lo que un ser humano puede aspirar. Lo que el pedía⸴ sus siervos se lo alcanzaban y tenía hombres que todos los días estaban dispuestos a dar la vida por él. Se puede decir sin exagerar⸴ que era un hombre feliz⸴ nada le faltaba. Por el contrario⸴ su vecino⸴ era un hombre sencillo⸴ del pueblo; un soldado. El otro era un rey. Un día aquel rey⸴ movido por la lujuria y la sensualidad⸴ decidió apoderarse también de la esposa de su fiel soldado y mandó a sus siervos que se la trajeran al palacio. ¿ Pero sabe una cosa ? Cuando uno comete una falta⸴ cualquiera que sea su naturaleza⸴ está obligado a cometer otra para cubrir la primera⸴ y luego otra para tapar la segunda. En otras palabras⸴ se convierte en un esclavo de su propio pecado. Pues así le pasó al rey de nuestra historia. David⸴ como se llamaba este hombre⸴ mandó a matar al esposo de la mujer que él había tomado para sí. Y como consecuencia Dios lo castigó quitándole al hijo que había engendrado en su adulterio. Nuestra cultura latina ha creado un símbolo masculino que se conoce como el ‘ macho ‘. Es el que confunde la hombría con la sinvergüenzada. Es el que le da palizas a su esposa y la encierra para que nadie la vea⸴ pero él a su vez quisiera para sí mismo la esposa del otro. Quiero que esto le quede claro y resuene en su corazón: ‘ No hay nada oculto que no haya de ser manifestado … y todo lo que hombre siembre eso también cosechará ‘ porque Dios no puede ser burlado.. Es doloroso que en nuestro ambiente latinoamericano prevalezca el ‘machismo’. El niño⸴ la niña⸴ desde muy temprana edad⸴ están escuchando la palabrita ‘ amante’. Ellos captan o intuyen lo que está sucediendo. Oyen conversaciones y litigios que hay en el propio hogar y⸴ al punto⸴ comprenden que las cosas no van por un sendero recto. Es una lástima porque estos malos ejemplos son como cizaña que se siembra en las tiernas almas de los niños. No es raro que más tarde se repita en sus vidas la triste historia de sus padres. El adulterio⸴ palabra que designa la infidelidad conyugal⸴ es una injusticia. El que lo comete falta a sus compromisos. Lesiona el signo de la alianza que es el vínculo matrimonial. Quebranta el derecho del otro cónyuge y atenta contra la institución del matrimonio⸴ violando el contrato que le da origen y compromete el bien humano.