RECOMPENSAS POR SERVIR.

Si bien es cierto que no hay incentivo que pueda generar suficiente mérito para asegurar que lleguemos al cielo mediante esfuerzos nuestros⸴ y si bien es cierto que somos salvos por la sola gracia de Dios⸴ sin que lo merezcamos⸴ no obstante⸴ repetidamente Dios promete recompensas a sus hijos por las buenas acciones cumplidas estando en el cuerpo. En el Sermón del Monte⸴ Jesús dijo a sus discípulos : ‘ Gozaos y alegraos ( cuando los hombres os persigan)⸴ porque vuestro galardón es grande en los cielos ‘ ( Mateo 5⸴12). De los labios de nuestro Salvador nunca salieron palabras innecesarias. ¡ Si dijo que la recompensa es grande⸴ debe tratarse de algo digno de que lo tengamos en cuenta ! Pablo fue uno de los que soportó gran persecusión – preso muchas veces⸴ azotado con muchos azotes⸴ odiado⸴ despreciado y apedreado. Podríamos decir que soportó grandes aflicciones. Y sin embargo dijo: ‘ De ninguna cosa hago caso ‘ ( Hechos 20⸴24). Leve tribulación las llamó. Su veredicto final sobre todo esto fue: ‘Esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria ‘ ( 2 Corintios 4⸴17). Lo que estaba diciendo era que todo el sufrimiento y la injuria no son nada comparados con la recompensa preparada para los creyentes en el día de la coronación. El apóstol Pablo discutió la calidad de nuestras obras en su parábola sobre el juicio⸴ al referirse al tribunal de Cristo. 1 Corintios 3⸴11-14 dice : ‘..porque nadie puede poner un fundamento diferente del que ya está puesto⸴ que es Jesucristo…….. Si lo que alguien ha construido permanece⸴ recibirá su recompensa⸴ pero si su obra es consumida por las llamas⸴ él sufrirá pérdida. Será salvo⸴ pero como quien pasa por el fuego ‘. Debemos tener claro que en este texto Pablo no se está refiriendo a los pecados de los cristianos ni a la pena de los mismos. La pena de los pecados del cristiano fue llevada por Jesús en la cruz del Calvario⸴ y esto ha quedado solventado ya de una vez por todas. Así⸴ la salvación del creyente no tiene nada que ver en el Tribunal de Cristo. ‘ Es necesario que todos nosotros ( los creyentes) comparezcamos ante el Tribunal de Cristo⸴ para que cada uno reciba según lo que haya mientras estaba en el cuerpo⸴ sea bueno o sea malo ( 2 Corintios 5⸴10). De lo que se trata el Tribunal de Cristo es del tipo de servicio hacia los demás y a favor del reino de Dios. Todo lo bueno⸴ noble⸴ lo que haya hecho para el Señor y no para los hombres será recompensado en este tribunal ( en el cielo); lo que haya hecho para agradar a las personas no será recompensado ( leer Colosenses 3⸴23-25).