SANIDAD INTERIOR: ABUSO SEXUAL EN LA INFANCIA “.”

La Biblia dice en Isaías 49⸴ 14 – 17 : ‘ Mi pueblo⸴ yo no te olvidaré⸴ yo te llevo grabado en mis manos. No te dejaré huérfano⸴ siempre te tengo presente ‘ . Un consejero cristiano expresó que de diez mujeres que ministró en sanidad interior⸴ ocho tuvieron experiencias relacionadas con el abuso sexual.. Es realmente sorprendente la cantidad de creyentes que asisten y sirven en distintas iglesias que han sido víctimas del abuso sexual⸴ y que guardan en lo profundo de su ser este terrible trauma. Las estadísticas revelan que una de cada cuatro niñas y uno de cada siete varones serán abusados sexualmente antes de que cumplan los doce años. En más del 90 % de los abusos⸴ el abusador será masculino y en más del 80 % será una persona conocida por el niño. Es obvio que no es fácil hablar de un tema tan desagradable como el abuso sexual infantil⸴ pero es mucho más doloroso cuando es una realidad en la vida de cientos y cientos de niños. Hasta 1974 las niñas abusadas sexualmente eran consideradas al igual que las mujeres violadas como ‘ provocadoras ‘ de tal acto. El modelo que se fue desarrollando señalaba que había víctimas y victimarios. Las víctimas se curarían con amor y afecto y los victimarios con la cárcel y el castigo. Sin embargo⸴ se comprobó que las víctimas podían luego transformarse en victimarios y que los victimarios en las cárceles eran violados y al salir reincidían continuando la cadena de violencia. Entre los síntomas del abuso sexual infantil están: – Llanto fácil⸴ por poco o ningún motivo aparente. – Cambios bruscos en la conducta escolar. – Ausentismo escolar. – Llegar temprano a la escuela y retirarse tarde. – Conducta agresiva⸴ destructiva. – Depresión crónica. – Conductas excesivamente sumisas. – Irritación⸴ dolor o lesión en la zona genital. – Temor al contacto físico. -No desear participar en actividades físicas. – Falta de deseo de asistir a las cosas de Dios. – Temor a que Dios se lo lleve. – Ideas de un Dios castigador o malo. -Sentimientos negativos hacia su yo o su propio cuerpo. Lo más doloroso es el silencio que mantiene o ha mantenido frente al abuso o violación: – Por miedo al enojo de la madre. – Por miedo a la venganza del padre. – Para evitar la ruptura del hogar. La gran mayoría no lo dice y guarda ‘ el secreto ‘ en lo profundo de su corazón sufriendo en silencio y soledad. ¡ Que vacío más grande es el haber llevado ese secreto tan doloroso durante muchos años !