TIATIRA: FALSAS ENSEÑANZAS.

‘ Conozco tus obras⸴ tu amor y tu fe⸴ tu servicio y tu perseverancia⸴ y sé que tus últimas obras son más abuntantes que las primeras. Sin embargo⸴ tengo en tu contra que toleras a Jezabel⸴ esa mujer que dice ser profetisa. Con su enseñanza engaña a mis siervos⸴ pues los induce a cometer inmoralidades sexuales y a comer alimentos sacrificados a los ídolos. Le he dado tiempo para que se arrepienta de su inmoralidad⸴ pero no quiere hacerlo. Por eso la voy a postrar en un lecho de dolor⸴ y a los que cometen adulterio con ella los haré sufrir terriblemente⸴ a menos que se arrepientan de lo que aprendieron de ella. A los hijos de esa mujer los heriré de muerte. Así sabrán todas las iglesias que yo soy el que escudriña la mente y el corazón; y a cada uno de ustedes lo trataré de acuerdo con sus obras…. Al que salga vencedor y cumpla mi voluntad hasta el fin⸴ le daré autoridad sobre las naciones…. También le daré la estrella de la mañana ‘. ( Apocalipsis 2⸴ 19-28). Esta iglesia se destacaba de varias maneras. No carecía de buenas obras⸴ amor⸴ fe⸴ servicio y paciencia. De hecho⸴ sus obras aumentaban en cantidad⸴ en vez de disminuir. Pero en la asamblea se había tolerado doctrina impura⸴ con el resultado de que se practicaban la fornicación y la idolatría. La iglesia había permitido a una autodesignada profetisa llamada Jezabel que condujese a los siervos del Dios al pecado. Así como la Jezabel del Antiguo Testamento había corrompido al pueblo de Dios con fornicación e idolatría⸴ así esta mujer enseñaba que los cristianos podían darse a estas prácticas sin pecar en ello. Quizá animaba a los creyentes a unirse a los gremios profesionales de Tiatira⸴ aunque esto involucraba honrar al dios o a la diosa del gremio y a participar en fiestas en las que se servían cosas sacrificadas a los ídolos. Probablemente hubo en Tiatira una profetisa literal llamada Jezabel. Pero los estudiosos de la Biblia ven también aquí una referencia al surgimiento de un falso sistema eclesiástico con su adoración de imágenes⸴ venta de indulgencias y absolución sacerdotal de pecados como la fornicación. El vencedor en Tiatira era el verdadero creyente que mantenía con firmeza las obras del cristianismo genuino. Su recompensa será reinar con Cristo durante el Milenio. Tendrá autoridad sobre las naciones y las regirá con vara de hierro. El Señor promete dar al vencedor la estrella de la mañana. Así⸴ se le promete al vencedor una parte en el Arrebatamiento. No se lo gana por sus obras⸴ sino que sus obras demuestren la realidad de su fe. Por cuanto ha sido genuinamente convertido⸴ recibirá la estrella de la mañana.