EL SILENCIO DE DIOS
Escuchad mi voz⸴ y seré a vosotros por Dios. Jeremías 7:23 En una o en dos maneras habla Dios; pero el hombre no entiende. Job 33:14 Si oyereis hoy su voz⸴ no endurezcáis vuestros corazones. Hebreos 3:15
Escuchad mi voz⸴ y seré a vosotros por Dios. Jeremías 7:23 En una o en dos maneras habla Dios; pero el hombre no entiende. Job 33:14 Si oyereis hoy su voz⸴ no endurezcáis vuestros corazones. Hebreos 3:15
Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra⸴ ni una jota ni una tilde pasará de la ley⸴ hasta que todo se haya cumplido. Mateo 5:18
(Los discípulos preguntaron a Jesús:) ¿Quién es el mayor en el reino de los cielos? Y llamando Jesús a un niño⸴ lo puso en medio de ellos⸴ y dijo: De cierto os digo⸴ que si no os volvéis y os hacéis como niños⸴ no entraréis en el reino de los cielos. Mateo 18:1-3
Si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad⸴ él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos⸴ sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho. 1 Juan 5:14-15
Le dijo Jesús: Las zorras tienen guaridas⸴ y las aves de los cielos nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza. Lucas 9:58 El Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido. Lucas 19:10
Al que no conoció pecado⸴ por nosotros lo hizo pecado⸴ para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él. 2 Corintios 5:21
(Jesús dijo:) El que tiene mis mandamientos⸴ y los guarda⸴ ese es el que me ama. Juan 14:21
Aunque de nada tengo mala conciencia⸴ no por eso soy justificado; pero el que me juzga es el Señor. 1 Corintios 4:4 Dios es el que justifica. Romanos 8:33
(Pilato dijo a Jesús): ¿A mí no me hablas? ¿No sabes que tengo autoridad para crucificarte⸴ y que tengo autoridad para soltarte? Respondió Jesús: Ninguna autoridad tendrías contra mí⸴ si no te fuese dada de arriba. Juan 19:10-11
Alzaré mis ojos a los montes; ¿de dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene del Señor… No dará tu pie al resbaladero⸴ ni se dormirá el que te guarda… El Señor te guardará de todo mal; el guardará tu alma. Salmo 121:1-7