EL MILAGRO DE LA ALMOHADA

Materiales bíblicos para el mundo

EL MILAGRO DE LA ALMOHADA

22 enero, 2019 Tratados 0

En el libro de Hechos de los Apóstoles 9⸴36-43⸴ leemos que en la ciudad de Jope⸴ en Israel⸴ había una mujer que dedicaba sus bienes a socorrer a los pobres. Se llamaba Tabita . Y sucedió que al morirse esta generosa mujer⸴ los pobres que ella socorría dispusieron organizarse como una especie de ‘ SINDICATO DE SÚPLICAS ‘ y enviaron una embajada a Pedro para que viniera a consolarlos. El apóstol se vino corriendo desde la ciudad cercana y cuando llegó a Jope encontró a todo aquel ‘ SINDICATO ‘ de pobres⸴ llorando desconsoladamente. Eran viudas⸴ huérfanos ⸴ ancianos y enfermos . Uno le mostraba el saco que Tabita le había regalado⸴ otro le presentaba la camisa y el pantalón que ella había cosido para regalarle. Unas les mostraban los zapatos que la buena mujer les había conseguido y otras los vestidos que les había dado para sus hijos pobres. Y le gritaban al apóstol: ‘ Ahora nos hemos quedado sin la que era para nosotros como nuestra mamá ⸴ nuestra abogada y nuestra bienhechora ..’ Y Pedro se conmovió y se puso a orar a Jesucristo ⸴ y llegando a donde estaba la difunta le gritó emocionado’ ¡Tabita⸴ levántate ! ‘ y la muerta resucitó… y muchos creyeron en Cristo ante aquel milagro que obtuvieron para una bienhechora ⸴ las lágrimas y súplicas de los pobres que ella había socorrido.



Cerca de Granada⸴ en una tienda del camino⸴ fue dejado un niñito abandonado⸴ con este letrero en


su cuna : ‘ Por favor: que alguien se compadezca de este pobre huérfano ‘. Los campesinos de los alrededores eran muy pobres y nadie se arriesgaba a encargarse de él. Hasta que al fin un sencillo labriego dispuso llevarse al niño a su casa para criarlo . Su esposa se alarmó al verlo llegar y le echó en cara que ya tenían cuatro hijos para alimentar y que estaban muy nesecitados . Pero el hombre le respondió tranquilamente ‘ donde comen cuatro ⸴ pueden comer cinco. Confiemos en Dios que ÉL proveerá ‘. Y resultó que al alzar al niño ⸴ descubrieron que debajo de la almohada habían 20 mil dólares .



No siempre Dios paga así tan inmediatamente lo que se hace por los pobres⸴ pero sí ha prometido solemnemente por medio de su hijo Jesucristo que ‘ quien regale a un necesitado aunque sea un vaso de agua ⸴ no se quedará sin recompensa ‘ (Mateo 10⸴ 42 ) . Y Dios recompensa siempre bien.


Él sabe pagar con espléndida generosidad.



San Pablo recomendaba :’ No os canséis de hacer el bien⸴ porque a su tiempo recibiréis la recompensa ‘. ( 2 Tesalonicenses 3⸴ 13 ). A su tiempo⸴ cuando menos pensemos y del modo más inesperado recibiremos las recompensas por todas las ayudas que hayamos prestado.