LAS CORONAS EN EL CIELO.

En Lucas 6⸴ 22 – 23 leemos: ‘ Dichosos ustedes cuando los odien⸴ cuando los discriminen⸴ los insulten y los desprestigien por causa del Hijo del hombre. Alégrense en aquel día y salten de gozo⸴ pues miren que les espera una gran recompensa en el cielo ‘. Pocas veces el cristiano ordinario piensa en el asunto de las recompensas del creyente en el cielo. Es un tema gozoso como solemne⸴ y debería servir de mucho incentivo para vivir una vida de santidad. Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo⸴ para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo⸴ sea bueno o sea malo ( 2 Corintios 5⸴10). No hay acto meritorio con el que podamos ganarnos la salvación⸴ pues ella es resultado del increíble e inmerecido amor de Dios. Pero el hecho mismo de que Jesús hablara de recompensas por el servicio en varias ocasiones indica que él las consideraba un artículo de fe importante. El apóstol Pablo dice en 2 de Timoteo 4⸴ 8 : ‘ Por lo demás me espera la corona de justicia que el Señor⸴ el juez justo⸴ me otorgará en aquel día; y no sólo a mí⸴ sino también a todos los que con amor hayan esperado su venida’.
La Biblia menciona LA CORONA DE VIDA (Santiago 1⸴12 y Apocalipsis 2⸴10). Esta corona es otorgada por soportar y triunfar sobre la prueba . LA CORONA DE JUSTICIA ( 2 Timoteo 4⸴8). Esta corona es dada a los que hayan terminado su carrera con integridad esperando la venida de Jesús. LA CORONA INCORRUPTIBLE ( 1 Corintios 9⸴25). Esta corona se otorga a aquellos que luchan por la excelencia⸴ por ser cada día mejores. Para ello se requiere disciplina. LA CORONA DE GOZO. ( 1 Tesalonicenses 2⸴19). Esta corona es para el que gana almas. Que alegría encontrarnos en el cielo personas ganadas para Cristo a través de nuestro ministerio. LA CORONA DE GLORIA. (1 Pedro 5⸴ 2-4). Esta corona es para todos los líderes espirituales que han apacentado fielmente el rebaño del Señor; incluso llevando un ministerio pastoral sacrificado.