RECHAZANDO LA PREOCUPACIÓN.

Quizás⸴ en este momento que estás leyendo o escuchando la lectura de este tratado; se encuentre en medio de una gran preocupación. Quiero decirte⸴ que definitivamente⸴ la preocupación lleva a las personas a un solo lugar antes de tiempo: al cementerio. La preocupación persigue a toda clase de personas… ricas y pobres⸴ inteligentes y analfabetas. Los jóvenes se preocupan⸴ los viejos⸴ la gente endeudada⸴ la gente con demasiado dinero ( ¡ a pesar de que sus preocupaciones son muy diferentes a las nuestras ¡). Los solteros se preocupan por su vida romántica o por la falta de ésta. Algunos se preocupan porque no están casados⸴ y otros porque lo están. Los mejores médicos del mundo nos dicen que la preocupación es la madre del cáncer⸴ de las enfermedades del corazón⸴ de la alta presión sanguínea y de las úlceras. La preocupación nos llena la cara de arrugas. La preocupación es inútil. Jesús dijo: ‘ ¿ Y quién de vosotros podrá⸴ por mucho que se afane⸴ añadir a su estatura un codo ? (Mateo 6⸴27). La preocupación nunca ha aliviado una carga⸴ ni secado una lágrima.

Si en ti hay preocupación quiero que recuerde lo que dice la Biblia: ‘ Pues Dios no nos ha dado un espíritu de temor ‘ ( 2 Timoteo 1⸴7). El temor es la prueba de que Satanás controla nuestra mente. El temor demuestra que no confiamos en que Dios nos ayudará resolver el problema en que nos encontramos. Jesucristo es el Dios que jamás ha fallado⸴ y nunca lo hará⸴ por eso no debe preocuparse. Si estás preocupado por el futuro de tus hijos⸴ confiese lo que dice la Biblia: ‘ No he visto justo desamparado⸴ ni su descendencia que mendigue pan ‘ ( Salmo 37⸴25). El mismo Dios que te cuida hoy a ti cuidará de tus hijos. ¿ Por qué preocuparse ? Isaías 43⸴2 dice: ‘ Cuando pases por las aguas⸴ yo estaré contigo; y si por los ríos⸴ no te anegarán. Cuando pases por el fuego⸴ no te quemarás⸴ ni la llama arderá en ti ‘. ¿ Por qué preocuparse ? El Salmo 91⸴11 dice : ‘Pues a sus ángeles mandará acerca de ti⸴ que te guarden en todos tus caminos‘. Pablo dijo : ‘ Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía⸴ sino de poder⸴ de amor y de dominio propio ‘ ( 2 Timoteo 1⸴7).