LLAMADO FINAL.
El Cuerpo de Jesucristo hoy necesita desesperadamente un avivamiento. Lo necesitamos porque nuestra generación vive en una época de poderosa seducción demoníaca. Jesús advirtió que vendrían días como estos; días en los que Satanás trataría de engañar incluso a los escogidos de Dios. Hoy estamos presenciando el cumplimiento de las palabras de Jesús⸴ pues la humanidad encara una abrumadora inundación de tentaciones que le fueron desconocidas a las generaciones del pasado. Una santa pasión será el latido del obrar del Espíritu Santo en los últimos tiempos⸴ que cada vez está más cerca. Será el amor del Padre celestial derramado en y a través de sus hijos. El Padre anhela lanzar una demostración de sus hijos e hijas en el escenario de la historia. Más de una vez los evangelios registran que su voz retumba desde los cielos diciendo de Jesús:
presentarlos delante del mundo vestidos de bondad y justicia y coronados de santidad y decir: ‘ Estos son mis preciosos hijos⸴ a los que amo ‘.
Dios está buscando intensamente hijos con los que pueda guardar su pacto: ‘ Porque los ojos de Jehová contemplan toda la tierra⸴ para mostrar su poder a favor de los que tienen corazón perfecto para con Él ‘ (2 Crónicas 16⸴9).
Aunque Dios desea bendecir a su pueblo y usarlo para bendecir la Tierra⸴ el diablo siempre trata de destruir. Satanás quiere maldecir a los hijos e hijas y separarlos de su herencia y su destino eterno divino.
Usted debe tener muy claro que Dios quiere enviar un avivamiento. Está buscando personas que estén dispuestas a pagar el precio en oración vencedora y ayuno. En este día⸴ muchos están respondiendo a su llamado
. La clave es tener hambre y sed de Él. Jesús dijo: ‘Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia⸴ porque ellos serán saciados ‘ ( Mateo 5⸴6).